*El ingeniero militar norteamericano puso a Manzanillo en el mapa portuario moderno
*Conocedor de puertos, pensaba que era el mejor del mundo geográfica y topográficamente
Hace 123 años, en 1899, el gobierno de México contrató al Ingeniero y Coronel norteamericano Edgar K. Smoot, através de la Secretaría de Fomento Económico, para realizar las obras del Puerto de Manzanillo, que era un puerto desabrigado para la navegación, sin tener un nivel adecuado ni la infraestructura necesaria para despegar en su vocación portuaria-comercial, que fue la causa de su nacimiento en 1825, setenta y cuatro años antes.
Fue el 23 de mayo de ese año cuando se signó este contrato con el ya reconocido contratista estadounidense, natural de Virginia, y el 5 de junio se trasladó para vivir al puerto y para empezar el trabajo que le había sido encomendado. Llegó acompañado de varios de sus colaboradores que llegaron desde allende la frontera norte, y en los siguientes días de julio y agosto se dedicó a conocer la ciudad, conseguir en donde alojarse y contratar mano de obra local para la magna obra que llevaría a cabo.
Se señala que al conocer las bahías en su forma y disposiciones, sobre todo la de Manzanillo, que era en donde trabajaría, señaló con admiración que este era el puerto más bonito del mundo; declaración que repitió en varias ocasiones y ante diferentes personas. Se identificó los lugares de donde se extraería material, y se consideró que la cantera de roca que se ubicó adjunta al poblado de El Colomo sería la ideal para proveer de esta material para los trabajos que se harían. Se empezó el trazado de una vía férrea angosta que permitiría traer material para el enrocamiento desde aquella cantera hasta su lugar en la entrada de la bahía.
Fue el 3 de enero de 1900 cuando formalmente se inició la construcción del rompeolas, malecón y canales de saneamiento en las lagunas de Cuyutlán y San Pedrito, mismas que terminaron en 1906, y que inauguró el Presidente de la República, Gral. Porfirio Díaz Mori el 12 de diciembre de 1908. El 17 de mayo 1901 Smoot adquirió la locomotora 14, “La Esmeralda”, Sin embargo, a pesar que a todo lo largo del año se estuvo trabajando, no fue sino hasta el 5 de diciembre cuando se hizo la inauguración oficial de las Obras del Puerto de Manzanillo, al estar en el puerto representantes del gobierno federal, y en especial de la Secretaría de Fomento Económico.
Por cierto que, por ese tiempo, llegó de Jiquilpan, Michoacán, Eliseo Vargas Marín, para trabajar como ayudante y aprendiz del médico norteamericano que acompañaba al Coronel Smoot, como parte integral del equipo que se encargaría de hacer las Obras del Puerto de Manzanillo. El Ing. Smoot así como el personal capacitado y de sus confianzas que le acompañaba desde los Estados Unidos, se asentó en las faldas del Cerro de El Vigía, que era una de las zonas más saludables de la ciudad, alejada de las miasmas de la laguna, y sus casas tipo norteamericano formaron lo que se conoció como la Colonia Americana.
Edgar K. Smoot nació el 31 de enero de 1862 en Big Island, condado de Bedford, en el estado de Virginia, siendo militar norteamericano desde 1881, sirviendo en diferentes comisiones desde ese tiempo en el estado de Texas. Después trabajó en algunas secciones de la obra norteamericana portuaria en el Siglo XIX, que fue la del Puerto de Galveston. En el año de 1906, el Ing.
Edgar K. Smoot, ya muy identificado con Manzanillo, por el buen trato recibido hasta el momento, decidió construir para la ciudad una escuela, que sería inicialmente la Escuela La Madrid, en terrenos de su propiedad -los compró al llegar aquí- y con dinero de su peculio. Por cierto que en esta escuela se instaló el segundo reloj público que tuvo el puerto, ya que en 1890 se estableció el primero, en el frente de la Casa Stoll.
Otro dato curioso al respecto es que el 8 de agosto de 1914, en pleno fervor revolucionario, se le borró el nombre a la Escuela de la Madrid, cambiándolo por el de Hidalgo, que conservó hasta entonces.
También como un dato a destacar es que en noviembre de 1908, llegó en barco a Manzanillo el primer automóvil que hubo en todo el estado, traído por los hijos del Coronel Smoot, el cual se trasladó a la capital del estado el 16 de noviembre, causando sensación por la novedad y la modernidad que implicaba. Smoot lo ofreció en regalo al Gobernador del Estado, quien lo rechazó porque el sueldo del conductor, un hombre de color norteamericano también, era más alto que el del propio primer mandatario de nuestra entidad.
Con motivo de la inauguración de la vía ancha del ferrocarril de Manzanillo a Guadalajara, el 12 de diciembre de 1908 viene a Manzanillo el Presidente de la República, Gral. Porfirio Díaz Mori, llegando a las 12:30día, acompañado por el vicepresidente Ramón Corral; el Gobernador del Estado de Jalisco, Miguel Ahumada; el secretario de comunicaciones, Leandro Fernández; y el estado mayor presidencial.
Tras una ceremonia inaugural en la estación de Colima, parten hacia el Puerto, también acompañados por el Gobernador del Estado, De la Madrid, junto con su comitiva, inaugurando, aparte del ferrocarril, la primera fase de las obras del puerto, incluyendo el muelle de madera conocido como el de la Vía Hundida.
Posteriormente, el Ing. Smoot fue contratado para hacer obras en otros puertos y ciudades del país, merced al prestigio alcanzado por la calidad de sus obras; por lo que otros trabajos de ingeniería para el mejoramiento del puerto que se siguieron realizando en Manzanillo en los siguientes años quedaron a cargo de su hermano, Otis S. Smoot. Los terrenos propiedad de Smoot y otros norteamericanos les fueron expropiados en diciembre de 1932 por el Gobierno Federal.
