La salida de Estados Unidos del Acuerdo Climático de París, anunciada este lunes por Donald Trump tras asumir la presidencia de ese país, no sólo tendrá impactos sobre la salud de los estadounidenses y el cambio climático, sino que podría pegar a los ingresos de Pemex y por ende al erario.
El mandatario estadounidense anunció este lunes que su administración retirará por segunda vez a Estados Unidos del esfuerzo global para combatir el calentamiento planetario.
El republicano también anunció que declarará una “emergencia energética nacional” para ampliar significativamente la perforación en el principal productor de petróleo y gas del mundo.
Para Alejandro Montufar, director de la consultora PETROIntelligence, el que Trump enfoque su estrategia hacia las energías no renovables tendrá efectos negativos en el medio ambiente y la salud de la población estadounidense, por un mayor fomento a la industria del petróleo y del gas, así como menores precios de energéticos para México.
“En cuanto a México, podemos visualizar la posibilidad de efectos tanto positivos como negativos. Una mayor producción estadounidense de petróleo y gas puede generar menores precios de suministro de energéticos para México y los consumidores; sin embargo, también puede mermar los ingresos de Pemex”, comentó el especialista.
De acuerdo con Montufar, una mayor producción de energéticos por parte de Estados Unidos llevaría a la baja los precios internacionales del petróleo, por ejemplo, lo que afectaría a la mezcla mexicana.
No obstante, el especialista subrayó que esto dependerá del incremento a la producción de Estados Unidos que, enfatizó, no solo depende de Trump sino de la demanda global que, de acuerdo a varias instituciones de investigación, puede verse disminuida en los próximos años.