Un juez federal en Nueva Hampshire bloqueó la orden ejecutiva de Donald Trump que buscaba eliminar la ciudadanía por derecho de nacimiento
Un juez federal de distrito en Nueva Hampshire, Joseph N. Laplante, se convirtió en el tercero en fallar contra la orden ejecutiva del presidente Donald Trump que pretendía eliminar la ciudadanía automática para los hijos de inmigrantes indocumentados nacidos en Estados Unidos. Su decisión se suma a las emitidas por jueces en Seattle y Maryland la semana pasada, lo que representa un fuerte revés para la administración republicana en su intento de restringir el derecho constitucional conocido como jus soli o derecho de suelo.
Laplante, nominado por el expresidente republicano George W. Bush, afirmó que los argumentos del equipo legal de Trump no lo convencieron y anunció que en los próximos días emitirá una orden preliminar más extensa para detallar su razonamiento.
La Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) presentó la demanda argumentando que la orden ejecutiva de Trump es inconstitucional y atenta contra uno de los principios fundamentales de la nación. La querella fue presentada en representación de grupos defensores de inmigrantes, incluidas mujeres embarazadas cuyos hijos podrían ser afectados.
Por su parte, la administración de Trump sostiene que los hijos de no ciudadanos no están “sujetos a la jurisdicción” de Estados Unidos y, por ende, no deberían acceder automáticamente a la ciudadanía. Sin embargo, el fallo en Seattle, emitido por el juez federal John C. Coughenour, refutó esta postura y señaló que la Casa Blanca estaba ignorando la Constitución. Coughenour, designado por el expresidente republicano Ronald Reagan, enfatizó que “el Estado de derecho es un faro brillante, que tengo la intención de seguir”.
En Maryland, la jueza Deborah Boardman, nominada por el expresidente demócrata Joe Biden, también bloqueó la orden ejecutiva en respuesta a otra demanda promovida por grupos de derechos de los inmigrantes.
Mientras tanto, un cuarto juez federal en Boston, Leo Sorokin, quien fue nominado por el expresidente Barack Obama, aún no ha emitido un fallo en una demanda presentada por 18 estados.
A pesar de estas derrotas legales, la administración Trump apeló el fallo en Seattle y se espera que continúe su batalla en los tribunales. Hasta la fecha, se han presentado al menos nueve demandas en distintas jurisdicciones del país contra la orden presidencial.
Estados Unidos es uno de los aproximadamente 30 países que otorgan ciudadanía por derecho de nacimiento, un principio consagrado en la Constitución y vigente en la mayoría de los países del continente americano, incluyendo Canadá y México.
