Elon Musk ordenó a los empleados del gobierno federal detallar sus logros semanales, bajo amenaza de despido. La medida generó alarma y resistencia entre trabajadores y sindicatos
Elon Musk desató el sábado una ola de incertidumbre entre los empleados federales al ordenarles que enviaran un resumen de sus logros de la semana, con la advertencia de que no hacerlo se interpretaría como una renuncia. La instrucción llegó a través de un correo electrónico de la Oficina de Administración de Personal con el asunto “¿Qué hiciste la semana pasada?”, causando preocupación en múltiples agencias gubernamentales.
El mensaje, dirigido a trabajadores de organismos como el FBI, el Departamento de Estado, la Agencia de Protección Ambiental y los Institutos Nacionales de Salud, exigía respuestas antes del lunes a medianoche, sin incluir información clasificada. Aunque algunos líderes respaldaron la medida, otros, como el director del FBI, Kash Patel, pidieron a su personal que no respondiera hasta recibir más instrucciones.
La iniciativa de Musk se da en el marco de una reestructuración gubernamental promovida por el presidente Donald Trump, quien elogió la medida y pidió aún más agresividad en la reducción de la burocracia. Musk, por su parte, justificó la orden asegurando que escribir el informe no tomaría más de cinco minutos.
Los sindicatos y expertos legales criticaron duramente la exigencia. Everett Kelley, presidente de la Federación Estadounidense de Empleados del Gobierno, calificó la orden como un acto de “desprecio absoluto” hacia los trabajadores públicos y prometió impugnar cualquier despido. Por su parte, especialistas en derecho laboral señalaron que la instrucción no tiene fundamento en el sistema de servicio civil y podría ser ilegal.
El episodio refleja una estrategia recurrente de Musk, quien ha aplicado tácticas similares en sus empresas, como X (antes Twitter). En ese caso, también exigió a los empleados demostrar su productividad antes de realizar despidos masivos.
Mientras la incertidumbre crece entre los empleados federales, el gobierno de Trump aún no ha aclarado si la falta de respuesta al correo electrónico efectivamente resultará en despidos inmediatos.