4 de cada 10 ciudadanos tendrá obesidad en 2030

La obesidad en México representa un reto de salud pública con serias implicaciones médicas y económicas.

La obesidad afecta al 37.1 % de los adultos en México y se proyecta que su prevalencia aumente en la próxima década

La obesidad se ha convertido en una de las mayores amenazas para la salud pública en México y el mundo. De acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición Continua 2023 (Ensanut Continua 2023), actualmente el 37.1 % de los adultos en el país padece obesidad, y se estima que para 2030 la cifra aumentará a 4 de cada 10 mexicanos.
Este trastorno, caracterizado por una acumulación excesiva de grasa corporal, no es solo un problema estético, sino una grave condición médica que puede derivar en enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2, hipertensión y diversos tipos de cáncer. Además, los niños que presentan sobrepeso tienen una alta probabilidad de mantener esta condición en la adultez, perpetuando un ciclo de enfermedades crónicas que afectará a futuras generaciones.
El avance de la obesidad en el país responde a una combinación de factores sociales, económicos y culturales. Entre ellos, destacan el aumento en el consumo de alimentos ultraprocesados y bebidas azucaradas, el sedentarismo y la falta de información sobre hábitos de alimentación saludable. La urbanización y el acceso limitado a espacios recreativos también han reducido las oportunidades de actividad física en la vida cotidiana de muchas personas.
En el marco del Día Mundial de la Obesidad, conmemorado el pasado 4 de marzo, expertos en salud enfatizan la importancia de la prevención para reducir su incidencia y las complicaciones a largo plazo. “La obesidad es prevenible y tratable, pero requiere un compromiso conjunto de la sociedad y el sector salud. Es importante implementar cambios en el estilo de vida para reducir el impacto de la enfermedad en la población, realizando un mínimo de 150 minutos de actividad física a la semana, consumir abundante agua y disminuir la ingesta de bebidas azucaradas y alcohólicas”, afirmó la doctora Cynthia Vega, directora de Relaciones Médicas de PiSA Farmacéutica.
El impacto de la obesidad no solo se refleja en la salud, sino también en la economía. Según estimaciones, esta enfermedad representa aproximadamente el 6 % del Producto Interno Bruto (PIB) de México, debido a los costos médicos y la baja productividad laboral derivada de las complicaciones de salud.
Ante este panorama, el gobierno y diversas organizaciones han impulsado campañas para combatir la obesidad, como el etiquetado frontal de advertencia en productos ultraprocesados y la regulación de la publicidad dirigida a niños. Sin embargo, especialistas insisten en que estas medidas deben reforzarse con estrategias más amplias que incluyan educación nutricional, promoción del ejercicio y acceso a opciones de alimentación saludable.