En una historia que ha captado la atención en redes sociales y medios internacionales, una pareja de jóvenes cristianos decidió esperar hasta el día de su boda para darse su primer beso, asegurando que fue una experiencia “única y totalmente valió la pena”.
Kaytlin O’Neall y Drew Brown, ambos de 22 años, comenzaron su noviazgo en enero de 2021 y desde el inicio acordaron establecer límites físicos firmes, motivados por sus creencias religiosas y el deseo de construir una relación basada en el respeto y la conexión emocional.
La esperada muestra de afecto ocurrió el pasado 5 de octubre de 2025, durante su ceremonia nupcial en la mansión The Milestone Denton, en Krum, Texas, frente a 160 invitados. Fue entonces, al escuchar las palabras “puede besar a la novia”, que se dieron por primera vez un beso, lo que desató una ovación entre los asistentes.
“No fue por una tradición ni por presión, fue una decisión personal y espiritual”, expresó Kaytlin en una entrevista posterior. Drew agregó que el momento fue “surrealista” y confirmó que la espera le dio un valor especial a ese instante.
Aunque la decisión ha generado opiniones divididas en internet, muchos usuarios han aplaudido su convicción y la fortaleza para mantener sus principios en una época en la que este tipo de compromisos son poco comunes.
La historia de Kaytlin y Drew se ha convertido en un símbolo de que, para algunos, el amor también puede expresarse con paciencia, fe y decisión.