*Construcción con cuatro aulas y canchas deportivas en la cima del Vigía
*Vista panorámica urbana al frente y atrás a El Viejo y Las Coloradas
*Sitio con historia y potencial cultural y turístico, permanece olvidado
Desde los años sesenta, al empezar el declive de la telegrafía en Manzanillo, dejó de utilizarse el Centro SCOP (Secretaría de Comunicaciones y Obra Pública) en la parte alta del Sector 1, en lo que era el corazón del Barrio de El Vigía, y a pesar de ser un lugar con mucho potencial turístico y cultural, permanece en el abandono desde hace más de cincuenta años.
Este espacio, actualmente bajo la administración Gustavo Adolfo Sánchez, encargado de Telecomunicaciones de México en Manzanillo, incluye la antigua Escuela de Radiotelegrafía, que es una construcción con cuatro aulas o cuartos, unas canchas deportivas aptas para la práctica de futbol de sala, basquetbol y voleibol, y dos miradores, una al frente hacia la ciudad, y otra por la parte de atrás hacia las playas de El Viejo y Las Coloradas.
Se sube a este lugar por dos andadores que inician en la Carrillo Puerto y pasan a ambos lados de la Parroquia de El Carmen. El sitio se encuentra a poca distancia de lo que fueran las oficinas de Don Cristóbal Rodríguez, el célebre Vigía de Manzanillo por muchas décadas del siglo pasado, así como de la Plazoleta Mirador que permite obtener una vista de casi 360 grados hacia el Centro de la ciudad, la bahía de Manzanillo, Las Brisas, Salagua, Santiago y Miramar, sitio con los que podría hacer sinergia.
En el 2020 el gobierno municipal hizo algunos trabajos de mantenimiento y restauración del Centro SCOP, y pintó también el andador que lleva hasta este lugar, que es una de las pocas acciones que ha recibido en los últimos cincuenta años, en que ha quedado prácticamente en el olvido. Continuando el camino a través de la plaza del Centro SCOP en la cima del Sector 1, se encuentra el camino que desciende hasta la playa semi-virgen de El Viejo, la cual es de arena negra. Sánchez Cruz señaló que este lugar no tiene un uso actualmente, por lo que podría verse la manera de darle uno en coordinación con el gobierno municipal o la iniciativa privada.
Hay que decir que, cuando en 1825 se hizo el traslado del antiguo puerto de Salagua al nuevo de Manzanillo, uno de los primeros sitios que se habitó fue el Sector 1, ya que al ser una parte alta por donde soplaban los vientos marinos, era uno de los pocos puntos de la ciudad a donde no llegaban las miasmas o malos olores provenientes de la laguna de Cuyutlán o de Caimanes, pues hay que recordar que por aquellos tiempos aún no se comunicaba al mar con la laguna, obra que intentó hacer primeramente Porfirio Díaz, y que le tocó a Lázaro Cárdenas coronar durante su sexenio, con lo cual la ciudad fue más salubre, acabándose los malos olores, las tremendas plagas de mosquitos y las constantes epidemias por tanta insalubridad que ocasionaban infecciones y enfermedades y la proliferación de zancudos y virus.
Por aquellos tiempos, así como la mayoría de las personas se movían de un punto a otro de nuestra entidad a través del ferrocarril, la mayoría de comunicaciones se hacían por medio del telégrafo, por lo que en el año de 1938 se construyó en la parte alta del primer cerro que abre la bahía dentro de la ciudad, el Centro SCOP, por parte de esta secretaría federal, incluyendo la Escuela de Telegrafía y la explanada con sus canchas deportivas, rodeado todo con bardas con cerca perimetral.
En esta escuela se capacitaría técnicamente a los radiotelegrafistas de Manzanillo y la región, inclusive a personas de otros estados, debido a la alta demanda que existía por esta profesión. La explanada con todas sus bardas, cercas, pisos, canchas deportivas y salones de enseñanza se construyó, pues, en la parte más alta donde confluyen las elevaciones conocidas como Vigía Grande y Vigía Chico, viendo la parte frontal hacia el Centro de Manzanillo, y la parte de atrás, con vistas hacia las playas de El Viejo y Las Coloradas, quedando a poca distancia del Puesto de Vigilancia y Observación y Mirador de Don Cristóbal Rodríguez “El Vigía”
En aquellas aulas enseñó por mucho tiempo el oficio de la telegrafía Don Moisés Colunga, siendo algunos de sus primeros alumnos Ramón Corona y Héctor Pineda Lugo. Ahí estudió un hermano de mi madre, mi tío Jesús Cisneros Amaya, que, una vez concluida su preparación, encontró trabajo gracias a sus conocimientos ahí adquiridos en el por entonces nuevo aeropuerto de La Paz, Baja California Sur. Otros muchos egresados encontraron trabajo en diferentes puntos del Occidente del país e incluso lugares más lejanos de la costa del Pacífico mexicano y hasta el centro del país.
Esperemos que se le dé uso a este lugar con tan hermosas vistas y tanto potencial turístico y cultural, y con tanta historia detrás, pues también este antiguo barrio de la ciudad, uno de los más antiguos, está lleno de historias y leyendas, pues también fue asentamiento de extranjeros que tenían alguna relación con el puerto, tanto alemanes, como ingleses y estadounidenses, tanto que ahí se formó la llamada Colonia Americana, donde vivió por algún tiempo el famoso Ingeniero Coronel Edgar K. Smoot, quien fue el encargado de las obras del Puerto, así como su hermano Otis S. Smoot, contratista que, a la partida de su hermano a cumplir otras encomiendas en otras partes del país, continuó su labor en cuanto a obra civil en nuestra ciudad, participando en la nivelación y elevación de las calles de la ciudad.