Las subastas de objetos curiosos y únicos suelen generar revuelo entre coleccionistas y fanáticos, pero pocas veces un simple snack se convierte en una pieza de interés. Este es el caso de un Cheeto Flamin’ Hot que, por su particular forma, recuerda la icónica silueta del Jumpman, el logotipo asociado a Michael Jordan.
El peculiar aperitivo, de aproximadamente tres pulgadas, ha sido colocado en una vitrina especial que incluye estadísticas de la temporada de debut de Jordan en la NBA. La subasta comenzó con una oferta inicial de 275 dólares, aunque los expertos anticipan que el precio podría aumentar significativamente en los próximos días.
Este caso no es aislado. En el pasado, otros Cheetos con formas llamativas han alcanzado cifras sorprendentes en subastas. Uno con la silueta de Charizard, el popular personaje de Pokémon, fue vendido por 87.840 dólares, evidenciando que existe un mercado activo para este tipo de artículos insólitos.
La viralidad en redes sociales ha impulsado la búsqueda de snacks con apariencias inusuales, con la esperanza de encontrar piezas que se vuelvan valiosas. Para muchos, esto no solo es un pasatiempo, sino una oportunidad de inversión en un mercado poco convencional.
Los objetos relacionados con Michael Jordan son altamente codiciados en el mundo del coleccionismo. Un claro ejemplo es la venta de una tarjeta autografiada de la colección Upper Deck Ultimate (temporada 2003-2004), que se vendió por 2,9 millones de dólares, convirtiéndose en la más costosa de la leyenda de los Chicago Bulls.
Otro artículo histórico fue la camiseta usada por Jordan durante la temporada 1996-1997, la cual alcanzó un valor de 4,7 millones de dólares en Sotheby’s. La demanda de memorabilia de la estrella de la NBA sigue en aumento, y cualquier objeto vinculado a su imagen puede disparar su valor.
La venta del Cheeto Jumpman se está llevando a cabo a través de Goldin Auctions, una reconocida casa de subastas especializada en coleccionables deportivos. Con la notoriedad que ha ganado la pieza en redes sociales y el atractivo que representa para los fanáticos de Jordan, no se descarta que el precio final supere las expectativas iniciales.
Para los coleccionistas, poseer un objeto único relacionado con una de las máximas leyendas del deporte es una oportunidad invaluable. La exclusividad de esta pieza, sumada a su vínculo con el icónico logotipo de Jordan, podría convertir este Cheeto en el aperitivo más valioso de la historia.