Un nuevo “Milagro Mexicano”: Prospectiva económica y política en tiempos de incertidumbre global.


A mi Muy Resp. Gtuls. Héctor Ochoa

A mi QH Simón Abelino Blas

Introducción: El milagro de no estar en la lista

El reciente anuncio de la administración estadounidense sobre la imposición de aranceles a varios países, excluyendo a México, ha sido recibido con sorpresa y alivio. Este hecho, que algunos han calificado ya como un “milagro”, evidencia la compleja interdependencia económica entre ambas naciones. Sin embargo, al día siguiente del anuncio, las bolsas de valores cayeron estrepitosamente: la BMV perdió más de 3 puntos, pero el desplome más dramático fue el de Wall Street, con una pérdida superior a los 3 billones de dólares en un solo día (CNN Español, 2025).  Es difícil predecir cuanto tiempo va a continuar está caídas de bolsa y hasta qué punto.

Este escenario plantea una pregunta crucial y que pudiera parecer absurdo, pero todo es posible,: ¿podría México estar al borde de un nuevo “Milagro Mexicano”, similar al ocurrido entre 1940 y 1970, cuando el país experimentó un crecimiento económico sostenido gracias a la industrialización por sustitución de importaciones (ISI), ¿estabilidad política y desarrollo social? 

El primer Milagro Mexicano: Lecciones del pasado

El Milagro Mexicano fue un período en el que el país registró tasas de crecimiento superiores al 6% anual, impulsado por políticas keynesianas de inversión pública, protección industrial y un relativo control del mercado interno (Huntington, 1968). Como señala Sartori (1987), este modelo funcionó bajo un sistema de partido hegemónico (el PRI), que garantizó estabilidad política a costa de limitaciones democráticas. 

Sin embargo, el modelo colapsó en los años 80 debido a la crisis de la deuda, la corrupción y la falta de competitividad global. Dahl (1971) advirtió que los regímenes con crecimiento económico, pero sin pluralismo político terminan enfrentando crisis de legitimidad. México no fue la excepción. 

El escenario actual: Oportunidades y riesgos 

1. México como refugio económico

Con el posible encarecimiento de productos básicos y de todo en EE.UU. debido a los aranceles, muchos ciudadanos estadounidenses podrían considerar trasladarse a México, donde el costo de vida es menor. Esto podría generar una nueva ola de inversión y consumo, similar a lo ocurrido durante el primer milagro. 

2. El fantasma del proteccionismo y el fascismo en EE.UU.

Samuel Huntington (1996) planteó que las crisis económicas pueden llevar a sociedades a buscar líderes autoritarios. El regreso de Trump y su política arancelaria reflejan una tendencia hacia el nacionalismo económico, que podría degenerar en un proteccionismo agresivo. Fossaert (1983) argumentó que el capitalismo, en su fase de crisis, tiende a radicalizarse, lo que explicaría el giro de EE.UU. hacia políticas más aislacionistas. 

3. México en la geopolítica global

Si EE.UU. se repliega, México podría posicionarse como un puente comercial entre América Latina, Asia y Europa, aprovechando el T-MEC y nuevos acuerdos. Easton (1965) diría que el sistema político mexicano debe adaptarse para gestionar esta oportunidad sin caer en los errores del pasado: corrupción, falta de competitividad y dependencia excesiva de un solo socio comercial. 

Hacia un nuevo Milagro Mexicano: ¿Qué se necesita?

Para que México repita su éxito económico, se requieren: 

1. Inversión en infraestructura y educación (como en el primer milagro, pero con enfoque en tecnología). 

2. Diversificación comercial, reduciendo la dependencia de EE.UU. 

3. Estabilidad política con democracia real, evitando los autoritarismos del pasado (Sartori, 1987). 

4. Aprovechar la migración calificada de estadounidenses que busquen mejores condiciones de vida. 

Conclusión: ¿Milagro o estrategia?

Lo que algunos llaman “milagro” (la exclusión de México de los aranceles) es, en realidad, el resultado de una interdependencia económica que EE.UU. no puede ignorar. Sin embargo, México debe actuar con visión estratégica para no repetir los errores del pasado. 

Como dijo Robert Dahl (1989): “El desarrollo económico sin instituciones democráticas sólidas es un castillo de naipes”. México tiene la oportunidad de construir un nuevo milagro, pero esta vez, debe ser sostenible, inclusivo y democrático.